Si bien la mayoría de los argentinos conserva la tradición de Semana Santa que reúne a la familia para disfrutar de una cena con un rico pescado, de una merienda con la clásica rosca y de los deliciosos huevos de chocolate, llegar a la tercera semana de abril con presupuesto para enfrentar subas promedio del 55% interanual en los tres clásicos de la celebración, no será nada fácil. Los hogares enfrentan una inflación que ya se calcula del 10 % en el primer trimestre del año y las costumbres que requieren un esfuerzo extra se vuelven difíciles de sostener. Un informe de la consultora Focus Market (FM) reveló que hay productos que llegan a casi el 100 % de aumento, como el clásico filet de merluza que pasó de $ 140 a $ 250 el kilo.

El precio de una de las opciones más accesibles para la mesa del Viernes Santo muestra una variación aún más preocupante según el Índice de Precios al Consumidor que mide mensualmente el Indec. El kilo de filet de merluza fresco estaba $ 107 en febrero de 2018, luego atravesó la tormenta financiera y la devaluación del 100% de la moneda nacional, y llegó a febrero de 2019 (la última medición) con el 95% de incremento. Según el índice oficial, cuyo resultado de la inflación de marzo se conocerá a mediados de abril, el precio por kilo es de $ 207 el mes pasado.

“Para esta Semana Santa, la perspectiva es de un consumo moderado aunque la tradiciones y costumbres que involucran a las Pascuas tienen un alto nivel de conservación entre los argentinos”, aseguró, Damián Di Pace, director de Focus Market.

Es importante resaltar que en estas fechas el incremento estacional de los precios de estos productos es del orden del 10 al 15 %, advirtió el informe que a su vez registró alzas promedios en los pescados del 124% respecto de 2018. En los mariscos fue del 57,8 % y en el caso de los huevos de chocolate se identificaron subas de hasta el 95 %.

Los niveles de aumento prácticamente siguieron el movimiento del dólar. El kilo de corvina, otra opción muy buscada para Semana Santa, pasó de $ 110 a $ 189 y el kilo de salmón rosado, siempre de los más caros, se disparó de $ 340 a $ 749.

La lata de atún de primera marca por 170 gramos pasó de $ 59 a $ 113,40 promedio. Es un producto muy utilizado para tartas y empanadas y se necesita más de uno para un plan familiar.

De los mariscos, el calamar cambió de un margen de $ 120 a $ 130 en 2018 a costar hoy entre $ 255 y $ 265 el kilo, mientras que el mejillón pelado pasó de $ 220 el kilo a $ 265 y los berberechos pelados, de $ 450 a $ 499.

El informe de FM tiene en cuenta la comida elaborada que se ofrece en grandes cadenas de supermercados y en comercios de barrio, el aumento más fuerte se registró en las empanadas de pescado, que pasaron de $ 280 la docena a $ 720 (cada unidad está entre $ 50 y $ 60), mientras que la tarta gallega aumentó de $ 260 a $ 319.

Por otro lado y puntualmente sobre el consumo de merluza, los argentinos consumen en la actualidad 7,9 kilos per cápita, lo que representa una leve disminución de los 8,2 kilos alcanzados el año pasado, que si bien es una cifra que se encuentra por encima de los 4,5 kilos de comienzos de siglo sigue siendo muy alejada de los 50 kilos por habitante promedio de la carne vacuna.

De acuerdo a lo informado el último viernes por la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes (Ciccra), ese promedio descendió 13,4 % internual en el primer trimestre. Es el nivel más bajo de la historia.