Claudio Salas: “La implementación de retenciones en billeteras virtuales generó un retroceso en la inclusión financiera”

El contador público y especialista en tributación, Claudio Salas, cuestionó la forma en que el Gobierno provincial aplicó las retenciones de Ingresos Brutos a las billeteras virtuales. Alertó por el impacto negativo que generó en la actividad comercial cotidiana, la confianza financiera y la educación económica en San Luis.

En el marco del Día del Periodista, Claudio Salas, contador público y docente universitario, participó en una entrevista especial en La Verdad los Hará Libres, donde abordó en profundidad los efectos colaterales que generó la reciente retención del impuesto a los Ingresos Brutos sobre las billeteras virtuales. Su análisis fue tan riguroso como pedagógico: “La medida no es nueva en sí, pero su implementación fue desprolija, sin campaña informativa ni criterio práctico. Eso generó una psicosis innecesaria”, resumió.

“El anuncio no vino del gobierno, vino de Mercado Pago. Y eso desató una reacción en cadena. Comercios que dejaron de aceptar pagos digitales, consumidores confundidos, y hasta colas en los cajeros como no veíamos hace años”.

Falta de información, impacto real

Salas remarcó que el principal problema no es el impuesto en sí, sino la ausencia de comunicación oficial clara, lo que derivó en un clima de desconfianza y confusión generalizada. “Muchos pensaron que la retención afectaba a todos por igual, tanto a quienes están inscriptos como a quienes no. Y no es así”, explicó. “El impuesto sólo recae sobre quienes están registrados en Ingresos Brutos. Pero no se aclaró con anticipación, y eso generó miedo”.

“Estamos retrocediendo. Habíamos avanzado en educación financiera y bancarización popular, pero hoy la gente volvió al efectivo por temor. Eso es muy grave”, lamentó.

Injusticias prácticas y consecuencias económicas

Entre los puntos más críticos, Salas detalló que las retenciones se aplican incluso sobre transferencias entre familiares, lo que pone en evidencia la falta de adecuación del sistema:

“Me pasa que mi hija me transfiere plata para hacer una compra y me retienen ingresos brutos. Eso no es una actividad comercial. Y sin embargo, me descuentan”, ejemplificó.

También subrayó que los comercios pequeños —ya presionados por impuestos nacionales, provinciales y municipales— ahora se ven obligados a ceder dinero que no pueden usar por 45 días, lo que los empuja aún más a rechazar los medios digitales:

“Si un comercio tiene saldo a favor, esa retención se convierte en un costo financiero, no en un impuesto justo”, denunció.

Además, alertó sobre el resurgimiento de los dobles precios: “Ya hay recargos por pagar con billetera virtual. Es como volver a la vieja época de los sobreprecios por tarjeta”.

Educación financiera y futuro

Docente universitario y promotor de la educación financiera en escuelas y universidades, Salas fue contundente:

“Argentina es uno de los países con menor alfabetización financiera del continente. No enseñamos en las escuelas cómo manejar el dinero, y después pretendemos que los jóvenes no se endeuden. Nadie nace sabiendo planificar un presupuesto”.

Finalmente, sostuvo que la medida adoptada por la provincia tiene un sesgo recaudatorio y fue inoportuna: “La aplicaron justo después de las elecciones y tras anunciar una baja en la coparticipación. Eso no es casual”.

Con su estilo claro y directo, Salas propuso alternativas concretas: compensación automática de saldos, exclusión de retenciones a quienes ya tienen saldo a favor, y exenciones para operaciones no comerciales. “El Estado tiene que ser eficiente para cobrar, pero también justo para devolver o no castigar doblemente a quien ya cumple”.