La autopsia de los 39 chinos hallados muertos en un camión en Inglaterra reveló que los ciudadanos murieron asfixiados y congelados en un contenedor refrigerado que estaba cerca del Canal de la Mancha, en Reino Unido. 

Los investigadores trazaron la ruta que habrían transitado las víctimas y determinaron que fallecieron dentro de un contenedor refrigerado que era transportado por un camión en el parque industrial Waterglade, en Essex. 

Según trascendió, los cuerpos fueron analizados por autoridades policiales luego de que el conductor del vehículo Maurice Mo Robinson adviertiera sobre el terrible descubrimiento. En tanto, el chofer está siendo investigado por homicidio y buscan determinar si este señor estaba al tanto de los cadáveres que estaba transportando. 

Un testigo advirtió la situación y llamó a emergencias.

Además, se conoció que otro caso similar se registró en el año 2000, en el puerto de Zeeburgge en Bélgica. En esa ocasión, 58 migrantes chinos murieron tras ser ingresados de forma clandestina en un camión de tomates y solo dos sobrevivieron. Según relataron: "Tras enfrentar un control policíal, el conductor del vehículo cerró una compuerta de ventilación para evitar que se escucharan ruidos. Esta falta de oxígeno los asesinó". 

Trascendió también que las bandas delictivas cobran unos 25 mil dólares por cada uno de los migrantes que quieran escapar del Reino Unido y detallaron que la ruta es larga e inhumana. "Recorren países de la ex Unión Soviética, Medio Oriente, Serbia, Hungría, Austria, Francia antes de un barco a Gran Bretaña desde Bélgica u Holanda", informó el medio DailyMail.

Autoridades buscan establecer si Robinson forma parte de la red ilegal o fue sólo un eslabón involuntario. Por el momento consiguieron que la Justicia lo demore otras 24 horas para poder ser interrogado nuevamente.

Según su declaración, fue él quien en una parada en Waterglade caminó hasta la parte trasera de  Scania rojo para buscar documentación sobre la carga y descubrió los cuerpos apilados y sin vida de los ciudadanos chinos congelados. En tanto, un testigo que estaba en el lugar y vio la situación llamó de inmediato al servicio de emergencias y luego se desmayó. 

Robinson, el conductor que está siendo investigado.