En 2007, Lionel Messi, con apenas 20 años, posaba para una sesión fotográfica en el vestuario del Camp Nou. Lo que parecía una simple actividad de beneficencia para un calendario organizado por UNICEF, hoy se ha convertido en una increíble coincidencia que une a dos figuras históricas del fútbol mundial.
Por un golpe del destino, Messi sostenía en sus manos al bebé Lamine Yamal, quien, 17 años después, está conquistando el mundo del fútbol como una de las grandes promesas internacionales.
Una foto que revive la historia
La fotografía, olvidada por más de una década, resurgió recientemente cuando el padre de Yamal la compartió en redes sociales con la leyenda: “El comienzo de dos leyendas”. En la imagen, se puede ver a Messi cargando a un pequeño Yamal, quien en ese momento solo era un bebé en brazos de su madre, Sheila Ebana.
“Es increíble pensar cómo dos trayectorias tan extraordinarias se cruzaron de una forma tan casual”, comentó Joan Monfort, el fotógrafo que capturó la escena. Monfort confesó no haber imaginado jamás que el bebé retratado junto a Messi sería años después una estrella naciente del fútbol internacional.
Lamine Yamal, el prodigio español
Lamine Yamal, ahora con 16 años y 362 días, se ha consolidado como una figura clave en el Barcelona y en la selección española. Su reciente golazo contra Francia en la semifinal de la Eurocopa no solo desató elogios, sino que también lo convirtió en el jugador más joven en anotar en la historia del torneo.
Además, Yamal ha batido récords en el Barça, siendo el jugador más joven en debutar como titular, anotar un gol en La Liga y ahora brillar en el panorama europeo.
Un encuentro inesperado
La sesión fotográfica de 2007 se organizó como parte de una rifa benéfica en Mataró, donde vivía la familia de Yamal. Al ganar, la familia tuvo la oportunidad de conocer a Messi y tomarse la memorable fotografía en el Camp Nou.
Monfort recordó cómo la timidez de un joven Messi hizo que la sesión fuera un desafío. “No era el Messi que conocemos ahora, era muy joven y reservado. No esperaba encontrarse con un bebé, y no sabía muy bien cómo sostenerlo”, relató.
Una coincidencia irrepetible
Joan Monfort asegura sentirse privilegiado de haber sido testigo de este momento único en la historia del fútbol. “Es una conjunción de casualidades que solo se da una vez en la vida. En aquel momento, nadie podía imaginar lo que el futuro tenía reservado para ese bebé y ese joven futbolista”, expresó al diario El País.
Dos caminos que marcaron el fútbol
Hoy, la fotografía de Messi y un Lamine bebé simboliza el inicio de dos trayectorias legendarias. Lionel Messi, consolidado como el mejor jugador de la historia, y Lamine Yamal, un talento que promete ser el futuro del deporte, se cruzaron en un evento que ahora parece predestinado.
Ambos comparten no solo el talento y la dedicación al fútbol, sino también la capacidad de inspirar a millones alrededor del mundo. Su historia conjunta nos recuerda que, en el fútbol como en la vida, las coincidencias a veces se convierten en leyendas.